Es un claro ejemplo de cómo se transforma una industria cuando se dispone de mejor y mayor cantidad de información de forma ordenada.
La aplicación de la IA puede provenir de dos lados:
Por parte del asegurador: en donde se podrá conocer cual es el verdadero factor de riesgo de cada persona, acción, negocio, etc. Esto se traducirá en bajar la incertidumbre lo que debería impactar las primas y cambios en las pólizas.
Por otro lado el asegurado u objeto asegurado, por ejemplo un auto, el cual se hace autónomo, la probabilidad de que ocurra un accidente debería tender a disminuir, debido a que con mayor información se controlan más variables lo que evita la ocurrencia de un siniestro.
O sea, se evitan los siniestros y se conocen mejor el riesgo asociado.